Durante la guerra civil española el capitán Jan Lozano, el sobrino de un general, se lleva a un conductor jovencito llamado De Cruz para una misión suicida atravesando la zona de nadie. Pero son capturados por unos republicanos y de repente empiezan a aparecer zombies por todas partes, así que tendrán que colaborar para sobrevivir.
Nos adentramos en el cine español más moderno, que ya tocaba, a partir de este título son películas de las que sé más bien poco, aunque han dado mucho que hablar la mayoría de ellas.
La película arranca con una masacre totalmente gratuita de unos nazis a unos de un pueblecito donde estaban celebrando una boda.
Estos zombies son realmente resilientes, sólo se les puede parar con un tiro en la cabeza. Y la infección se extiende bastante rápido, la transformación sólo necesita unos minutos.
Entre los republicanos hay un ruso, un americano, un radical y están comandados por un ferroviario. Luego se encuentran con unos fachas entre los que hay un moro y una monja. Todo muy diverso.
Poco a poco van cayendo, lo cual es un poco lo esperado. Aunque lo del radical es para darle de bofetadas.
Creo que repiten demasiadas veces el discursito de "tenemos que luchar juntos". Aunque lo gracioso es que De Cruz dice que los zombies no se dedican a discutir entre ellos cada dos por tres, lo cual es demasiado real, qué pesados.
Es un género que está resobadísimo, especialmente cuando le agregan toques de humor. Incluso situándola en medio de la Guerra Civil, que es quizás su única característica diferente, resulta más de lo mismo.
Dicho lo cual, me ha resultado entretenida, tiene algunos momentos graciosos que están muy bien. Me ha encantado la parte en la que insinúan que Jesús era un zombie pues me ha recordado a "Fist of Jesus" (2012). Y es que, a pesar de todo, está al nivel de las típicas películas de zombies, pero muy a nuestro estilo.
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