jueves, 11 de diciembre de 2014

力王 (1991)

También conocida como "Story of Ricky" y "Riki-oh".

Lik Wong es encerrado en prisión durante 10 años por cometer un asesinato. El solo cree en la justicia y en la cárcel en la que esta solo hay corrupción y una mafia que la controla llamada la banda de los cuatro, que son cuatro hermanos que controlan cada pabellón. Pronto acabara matando al del pabellón que le ha tocado y los otros tres intentaran frenarle a cualquier precio.

Esta maravilla llego a mis manos allá por los años 90 en version doblada mucho antes de que los dvd fuesen de uso común en hogares. Es una de las películas con las que mejor me lo he pasado porque combina violencia extrema con artes marciales. El nivel de gore es elevado, aviso.

Basada en un manga que también fue adaptado en forma de anime en dos OVAs titulados "Riki-Oh" (1989) (también conocido como "Riki-oh: The Wall of Hell") y "Riki-Oh 2: Horobi no Ko" (1990) (también conocido como "Riki-oh: Child of Destruction").

Lo mejor son los efectos especiales, realmente cutres pero es una manera de mostrar brutalidades y que resulten graciosas, aunque no se hasta que punto fuese esa la intención original. Los efectos se dividen principalmente en muñecos muy mal hechos a los que van mutilando pero que solo salen durante unos frames para intentar dar el pego y efectos sobre la propia piel del actor, siempre brutales.

En pocos minutos ya empiezan a haber muertes, al protagonista no le importa asesinar con tal de ejercer la justicia. Aunque es consciente que ha de ir destruyéndolos poco a poco hasta llegar al ayudante del alcaide, el más corrupto de todos.

Por cierto, hablando del ayudante, la otra vez no me fije pero en su despacho tiene un par de estanterías llenas de cintas de vídeo originales, son todo películas porno. De hecho incluso en las tomas abiertas se ven claramente las típicas portadas, es una manera mas de mostrar la impunidad con que procede en su prisión.

Resulta interesante comprobar que pese a que el protagonista es siempre superior a sus oponentes casi siempre recibe heridas, algunas muy graves, pero que se recupera de ellas sin dejar el menor rastro en poco tiempo. La más curiosa quizás sea cuando le cortan un tendón del brazo y va el tio y se hace un nudo sin más.

Muy recomendable para los fans del gore sobre todo si te la tomas en plan coña, es desternillante. Ademas que la violencia no tiene limites, nunca sabes con que te van a salir en la próxima escena. Es una de esas películas que debería tener secuela, pero no remake porque es perfecta tal y como fue hecha en su día.

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